En el Forrest Fitness Center, el gimnasio de California Lutheran University, géneros de mujeres y hombres pueden hacer ejercicio entre las seis de la mañana hasta las diez de la noche. 

Maddy Griess, la coordinadora del Forrest Fitness Center y una de las entrenadoras de rendimiento atlético, dijo que desde un punto de vista social, el gimnasio es un espacio dominado por hombres, y lo ha sido por mucho tiempo. También dijo que en años más recientes ha aumentado la afluencia de más mujeres participando especialmente en levantamiento de pesas. 

Kayla Druxman, promoción de 2025, asiste al gimnasio cinco a seis veces por semana. Ella dijo que no hay mucha publicidad cuando las mujeres van al gimnasio comparado a cuando los hombres van al gimnasio. Dijo que las mujeres no se sienten seguras cuando hacen ejercicios sea porque los hombres se les quedan viendo o porque muchas de las normas y reglamentos del Forrest Fitness Center están dirigidas a las mujeres y cómo se visten. 

El Forrest Fitness Center prohíbe que individuos se vistan en camisas que no cubren todo el pecho y el estómago. 

Aunque algunas mujeres quieran hacer ejercicio, la manera en que se vistan tal vez les impedirá acceso al gimnasio, también dijo ella.

Griess dijo que la moda deportiva hace que la ropa femenina calce más piel en las áreas que están tratando de proteger. Ella dijo que nunca quiere que parezca que estas normas y reglas se aplican estrictamente a las mujeres porque también hay muchos hombres que vienen con escotes muy bajos en la espalda y es lo mismo. 

También dijo que al final del día, su prioridad no es discriminar sino mantener la salud y seguridad de su facilidad tratando de mantener el sudor en tu cuerpo y protegiendo tu piel del equipo.

Bruno Mostajo, promoción 2025 y futbolista de Cal Lutheran, dijo que su equipo y él van al gimnasio con mucha frecuencia. 

“Es una experiencia buena porque estamos teniendo sesiones de gimnasio intensas para mantener buen rendimiento en fútbol. Pero fuera del equipo, yo por mi cuenta solo voy dos a tres veces por semana al gimnasio,” Mostajo dijo. 

Dijo que en las veces que él entrena solo, ni siquiera considera a otras personas y él está allí para hacer su entrenamiento y luego se va sintiendo mejor.

“Yo pienso que a lo mejor se sienten un poco incomodas…yo pienso que se pueden sentir observadas por el resto de chicos cuando están haciendo algún trabajo,” Mostajo dijo.

Griess dijo que hace lo mejor que ella puede para asegurarse que todos se sientan cómodos en este ambiente mientras también asegurándose que su facilidad esté segura y limpia.

Ahora Cal Lutheran tiene un nuevo club que se llama Cal Lutheran Fitness Girls, este club tiene la misión de hacer que las mujeres se sientan cómodas dentro y fuera del gimnasio, independientemente del nivel de condición física de cualquier persona.