STRIVE Scholars Program es un programa ofrecido en La Universidad Luterana de California  dirigido por la Dra. Coronado y la profesora Rowley. Está compuesto de estudiantes de primera generación que están estudiando a nivel posgrado, específicamente en el programa de consejería. El programa se dedica a apoyar a los estudiantes dentro del programa de consejería con la transición al nivel posgrado. 

En la página web de STRIVE, cualquier estudiante que está en el proceso de obtener una maestría en consejería en Cal Luterana y que es estudiante de primera generación es invitado a solicitar y unirse al programa. 

Para solicitar, primero se debe ser admitido en el programa de asesoramiento educativo de Cal Luterana. Después de ser aceptado al programa, los estudiantes de primer año asistirán a talleres. 

En su segundo año los miembros tienen la oportunidad de ser mentores para otros académicos de STRIVE. 

El tercer año los estudiantes son invitados a hablar a los estudiantes nuevos de STRIVE acerca de sus experiencias dentro del programa. En estas pláticas también los participantes les comparten como les va en su profesión. 

A tres estudiantes se les invita compartir información acerca del programa y sus experiencias. 

Jennifer Herrera-Alvarado, es una estudiante de consejería y mentora de STRIVE, que está en su último semestre. Herrera comparte sobre cómo STRIVE le ha ayudado, con recursos que ofrecen y personalmente. 

Herrera dijo que STRIVE le ha dado la confianza en creer en sí misma y en su habilidad. Para ella, es un espacio donde se siente aceptada, tranquila y motivada. 

“Ahí conocí a muchas personas antes de empezar la maestría [y] me gustó mucho porque yo estaba muy nerviosa antes de empezar, entonces ver a personas que van a estar en mi [grupo]… ayudó mucho,” Herrera dijo.

Herrera dijo que no solo le brindaron un espacio en el que se sintiera incluida, sino que también le enseñaron habilidades técnicas para ayudarla en su carrera profesional. 

“Me enseñaron el proceso para aplicar a una conferencia, me ayudaron a conectarme con personas para darme la ayuda financiera para ir a conferencias que son fuera del estado,” Herrera dijo.

En su caso, Herrera pudo asistir a una conferencia en Colorado porque STRIVE le ayudó a buscar ayuda financiera. 

También Herrera mencionó que la relación entre ella y su profesora llegó más allá de lo superficial; que en realidad le importa a sus profesoras. Herrera dijo que ella se ve en ellas y le da ánimo.

“Siempre me he sentido como que puedo contarles todos mis problemas… Y ell[a]s me pueden ayudar,” Herrera dijo.

Herrera expresa su gratitud por el apoyo y ayuda que ha recibido a través del programa,“[S]olo quiero decir que estoy muy agradecida de estar en el programa. Creo me ayudó mucho en mi experiencia. Estoy en mi último semestre y siento que el programa hizo toda la diferencia.” 

Yaqueline Rodríguez, de primer año, platica de cómo se siente tan apoyada, especialmente como una estudiante nueva. Al empezar su licenciatura, Rodríguez sentía que no tenía el apoyo de nadie. 

Rodríguez dijo que tenía dudas al empezar otra vez, pero cuando se unió a STRIVE, sintió que obtuvo el apoyo que le faltaba.

“Yo me gradué con mi bachillerato en el 2017, entonces, tengo mucho tiempo sin estar en la escuela,” Rodríguez dijo. “Entonces yo sabía que ocupaba una comunidad que me apoyara… Personalmente, tenía mucho miedo volver a la escuela porque yo no soy de aquí, soy de Los Ángeles, entonces no conozco a nadie. Yo no conozco a nadie en mi familia que haya ido a un programa de maestría. Entonces, yo [reconocí] que ocupaba ese poquito más de apoyo.”

Rodríguez dijo que para ella STRIVE sirve como un espacio para formar una comunidad. Ella ha descubierto muchas cosas sobre ella misma durante las sesiones donde hablan de temas acerca de la identidad. 

Rodríguez dijo que siente que el programa le está ayudando a desarrollar su liderazgo, desarrollarse a sí misma y ver dónde puede crecer más como persona.

Como Herrera, Rodríguez se siente empoderada y motivada al ver sus profesoras y cómo ellas han llegado tan lejos.

“Si hay un alumno que tenga interés en el programa de consejería,” Rodríguez dijo. “Anímense a hacer preguntas. Anímense a platicar con nosotros, los que estamos en el programa y los que se han graduado. No están solos. Si tienen una duda, posiblemente, lo más seguro, es que yo he tenido esa misma duda… Hay una comunidad para ustedes y solo tienen que encontrarla y hacer preguntas.”

Otra académica de primer año, Kenya Álvarez, aprecia todos los recursos que ofrecen, como las sesiones donde hablan de ciertos temas, la oportunidad de socializar con los miembros y el profesorado. 

“El ambiente que hay es algo positivo. Todos los estudiantes siento como que tienen las mismas metas que yo tengo. También, como estudiantes de primera generación, tenemos experiencias iguales y se siente [validado] tener esos estudiantes que puedo confiar en, si necesito la ayuda,” Álvarez dijo. 

Álvarez dijo que siente que cuando hablan de temas profundos ayuda con su reflexión personal. Ella dijo que cuando entiendes mejor a la gente puedes ayudarla y éso es parte del programa.

Álvarez, Herrera y Rodríguez, también valoran el programa y lo que hacen por ellas. 

Álvarez dijo que está feliz con su decisión de estar en el programa porque siente que durante la licenciatura no tuvo oportunidades de conectarse con estudiantes de primera generación.