Tener la habilidad de ser bilingüe es sumamente importante. Hoy en día, muchos empleos piden o prefieren que sus empleados sean bilingües. Para ser bilingüe, se tiene que hablar dos idiomas con fluidez.
Hay muchos individuos que entienden otro idioma, pero no lo pueden hablar, ni escribir, ni leer. Aunque la comprensión es aceptable, la habilidad de poder contestar y comunicarse efectivamente es sumamente importante.
La Asociación de Investigación para el Desarrollo Intercultural, conocido como IDRA en inglés, dijo que los niños en Estados Unidos que entran a la escuela con la habilidad de hablar otro idioma, tienen muchos beneficios en su vida. Pero si los papás y maestros no ayudan a mantener el idioma nativo, los niños pueden perder estos beneficios.
La página web de IDRA dice que el primer idioma de un niño es crítico para su identidad y para mantener su cultura. La habilidad de mantener su cultura trae positividad en su autoconcepto. También, si el idioma nativo no se mantiene, los vínculos con la familia y otros miembros de la comunidad pueden ser perdidos.
En la Universidad Luterana de California, hay muchos estudiantes bilingües. Un gran porcentaje de estos estudiantes bilingües son de ascendencia hispana. Luís Pérez Jr. es un estudiante de cuarto año, y es el tesorero de la Organización de Estudiantes Latinoamericanos.
“En mi opinión, es algo muy importante de mantener un idioma nativo”, Pérez Jr. dijo. “Es importante mantenerlo porque es algo muy bonito poder relacionarse con personas de nuestro país nativo o de nuestros ancestros. Y no sentirnos aislados porque sí se siente un grado de separación con personas con las que no se puede relacionar”.
Pérez Jr. también dijo que desafortunadamente hay muchos individuos que crecieron en Estados Unidos que no han podido mantener su idioma nativo. Pérez Jr. dijo que esto se puede deber a los cambios culturales que toda una familia puede tener.
“En la escuela primaria mi mamá me ayudaba con mis tareas, y ella siempre me hablaba en español, pero yo respondía en inglés. Entonces, en el proceso, yo le enseñé inglés a mi mamá y ella me enseñaba español”, dijo Pérez Jr.
Pérez Jr. dijo que este método funcionó porque aprendió español y su mamá tiene una comprensión alta de inglés.
Isaí Espinosa Tapia, co-presidente de LASO y estudiante de segundo año, dijo que cuando era niño, él quería ser como sus amigos que tienían papás americanos o de segunda generación que hablaban bien el inglés.
“Hay diferentes batallas y problemas para ser nacido aquí de primera generación”, dijo Tapia. “Pero creo que esa es parte de la cultura, el esfuerzo y los problemas que tenemos nos da esa mentalidad que los papás nos han pasado a nosotros. La idea de que nos pongamos las pilas para que todo vaya a salir bien”.
La cultura y mentalidad, dijo Tapia, de sus padres es diferente en Estados Unidos a la que tenían en México.
“Hay diferentes generaciones que no saben español y no aprenden la cultura de una manera que los papás han aprendido, y creo que no es la culpa de ellos”, dijo Tapia. “Puede ser que los papás crean que es más importante que los hijos no aprendan el español por su protección”.
La Decana Asociada de Equidad, Inclusión y Pertenencia, Lorena Muñoz, dijo que para el año 2050 va a ver más hispanoparlantes y los latinos en Estados Unidos que cualquier otra minoría. Muñoz dijo que vamos a ser muchísimos y de alguna manera va a ver un beneficio en hablar con fluidez.
“Cuando uno vive indocumentado en Estado Unidos, vivir es muy diferente. La libertad que tiene uno de navegar el espacio, de poder protestar, de poder estar, ejercer sus derechos, todo eso se va a la basura”, dijo Muñoz.
Muñoz dijo que siempre se tiene que pasar por desapercibido para que no se enfoquen las autoridades en ti, porque la persona sin papeles tiene un gran riesgo. Muñoz dijo que conoce a muchas familias que perfeccionan el inglés, especialmente con sus hijos, para que no los confundan o no les den alguna razón para que se piense que son indocumentados.
La asimilación es uno de los factores más grandes por lo cual muchos individuos pierden su cultura y su idioma nativo. En otros tiempos, el estatus migratorio de un individuo le impedía expresar su cultura, y este miedo se transfirió a otras generaciones. Pero, al final del día, es sumamente importante que una persona mantenga su cultura y su idioma nativo para tener un alto autoconcepto.